Este Octubre nos fuimos de vacaciones el marido y yo, esta vez solos, los compadres tuvieron vacaciones familiares, asi que les hire contando de poco en poco... como nos fue....
Atlanta:
Atlanta nos sorprendió realmente, teníamos la idea de que era una ciudad industrial, o simplemente un lugar X en el mapa de Estados Unidos, y pues no.. Es un lugar lleno de bosques. Verde por todos lados, entre Casa y Casa hay bosques, entre mall y mall hay bosques. Es una ciudad muy extendida así que no ves ni aglomeraciones de gente ni de edificios. La gente muy amable, la mayoría de color (oscuro por supuesto, tengo prohibido decir negro jajajaja que para mi no es ninguna ofensa al contrario, es una garantia de alegria), así que oyes gritos y carcajadas en cualquier lado.
Desde la tarde que llegamos nos dedicamos a recorrer la ciudad. Rentamos un carrito así que mi marido era el dueño de la Highway (nótese mi alto dominio del idioma)... y bueno, el tío Pancho nos había pedido comprar una computadora para el, aparte de una para mi (la que estoy estrenando en este momento) en Marietta. Y bueno, nos dispusimos a pedir direcciones para llegar a la calle de Marietta, pero no, a lo que teníamos que llegar era a la ciudad de Marietta. Nos mandaron a otro Mall precioso y enoorme pero no era lo que queríamos así que después de comer en un Panda Express y ante un momento de indecisión decidió mi marido en ir hasta allá. Bien armados de varios mapas y todas las buenas intenciones agarramos la 285 y luego la 41 y palla vamos...
Llegamos a los 15 minutos sin casi perdernos considerando que yo era la copilota, la que veía el mapa y la que tenía que decir que salida tomar, y nos fuimos directamente a la tienda de las computadoras, un par de vueltas mas y llegamos. Resumiendo, la del tío Pancho no la compramos pero la mía si, jeje, un mouse para no andar tonteando y de ahí a los malls. Ataque con singular alegría y haciendo honor a lo aprendido con mi comadre Blanca en las Vegas, me hice de ropita, la bolsa de mi compu, Gómez unos zapatos muy cómodos y agua, mucha agua.
Al día siguiente regresamos a Marietta, compramos más cosas y de ahí nos fuimos a cambiar el Citypass (ultrarecomendable!) para entrar al Acuario de Georgia, el Museo de la Coca- Cola y Cnn. Pero antes de llegar a nuestro destino, por alguna jugarreta acabamos metidos en el campus de la Universidad de Georgia! chamacos por todos lados, edificios de todas las carreras, que arquitectura, que leyes, que medicina, y los chamacos seguían saliendo de todos lados, que las casas de las fraternidades Alta Puca Mata o como se llamen. Después de dar vueltas como media hora y sin preguntar a nadie logramos salir, casualmente casi enfrente del estacionamiento de la Coca. Así que nos estacionamos y a caminar.
El Acuario es una cosa divina, toda clase de pescaditos, pescadotes, tiburones, ballenas, medusas, lo que se les ocurra que viva en el agua ahí lo tienen, que chulada de verdad! todo limpio, bonito, los pescaditos bien gordos, buenos para el sartén jajaja. Acordándonos del compadre Jorge que tanto le gusta el mar y todo lo que vive ahí, y lo mucho que lo hubiera disfrutado.
De ahí atravesamos una explanada y entramos al Museo de la Coca, muy divertido y lleno de recuerdos, todos los comerciales que veíamos en nuestra infancia, las cancioncitas que nos sabíamos, los refrigeradores viejos, y mil cosas más. Probamos como 160 diferentes productos que hace la Coca por todo el mundo, algunos muy bueno, algunos espantosos! Querías poder comprar todo lo que te vendían en la tienda pero pues no, empezábamos el viaje y no se podía.
Después nos fuimos al edificio del CNN, pero para llegar había que atravesar el parque Centenario conmemorativo de las olimpiadas, enoooorme, bien bonito. Cuando llegamos del otro lado pues ya hacia hambritita y nos metimos a comer a un restoran chino, que no nos gusto nadita y nos cayo pesado pero bueno, el hambre nos la calmo jajaja y nos dirigimos al CNN, pero oh, el último tour terminaba a las 5 y pues no nos toco. Nomas nos tomamos un cafecito en loby y tomamos algunas fotos.
De ahí al hotel, para entonces mis pies eran una pena.
Al día siguiente nos fuimos al Zoo, por supuesto los animalejos estaban en la hueva total, o de plano no querrían que yo y las 800 gentes más que estaban parada frente a su jaula los fotografiáramos, así que no tome mucho. El Sr. gorila que tomaba el sol y los pandas fueron los mas accesibles.
Acabando nos fuimos al Stone Mountain, un parque precioso donde hay una piedrota tamaño mundo, donde grabaron a unos héroes que realmente no supe quienes fueron. El lugar bien bello, con un club de golf muy cuqui, lugar para acampar, lago, bosques y mas bosques.
En algún momento nos metimos a comer al Red Lobster.. bueno! esos camarones, la langosta, la mantequilla!!! buenisimo!
Los pies... bueno como te digo que me moría!
Al día siguiente nos fuimos al Centro queríamos ir al Centro Histórico de Atlanta y después de perdernos por mi necedad jejeje nos paramos a preguntar, una señora súper amable no nos dio las señas, nos llevo!! no andábamos tan lejos pero nos dejo con la boca abierta la amabilidad y buena disposición.
Y bueno, llegamos y precioso (again!!) tienen un museo enorme de la guerra civil de USA, y afuera, entre riyitos y bosques han reconstruido una casa de los primeros pobladores del lugar, de madera toda, con un cuarto para ahumar los jamones, la cocina que estaba separada de la casa principal, la herrería etc.
También hay una casa enorme de un hacendado del azúcar, que se la construyo a su esposa con todos los lujos, con toda la influencia de Francia e Inglaterra que tanto les gustaba en esa época. Desgraciadamente dentro de la casa no permitían tomar fotos, pero creanme que esta igual que hace 100 años o más. Los descendientes vivos de esta pareja le vendieron el lugar al Ayuntamiento para que lo hicieran museo, como último deseo de esta Señora.
Acabando ahí nos fuimos a un restorant que le habíamos echado el ojo desde antes, pero estuvo cerrado cuando quisimos ir. Longhorn se llamaba y obvio eran carnes y mas carnes! buenisimo!!
Después al hotel a empacar y dormirnos temprano, pues salíamos a las 6 de la mañana a Nueva York y había que estar con anticipación en el aeropuerto, aparte de entregar el carro.
Nos levantamos pues a las 3 de la mañana (uta) y nos fuimos a dejar el carro, rapidito lo recogieron y ya estaba el camioncito para llevarnos al aeropuerto.
Checamos maletas y ahora trasládate a la sala E, que por supuesto es la ultima de la lista..... Es tan grande el aeropuerto que tienen un trenecito que te lleva de una sala a la otra, peeero empieza a funcionar a las 6:30 de la mañana!!!! o sea, a caminar!!!
y bueno, como teníamos buen tiempo pues ahí vamos, nosotros y todos los demás pasajeros orates que viajan a esa hora pues....
Finalmente y con la lengua de fuera llegamos a la sala y al ratito nos subieron al avión con destino a NY.
Y hasta ahí queda mi historia de hoy, continuo después con lo que sigue.
pd, te preguntaras que pasa con mis pies no? pues entre la reuma y la gordura me mataron durante todo el viaje... mi marido estaba medio molesto conmigo porque no le aguantaba más de 10 horas caminando peroo de plano cuando ya no aguantaba más me echaba al suelo jajaja.
Atlanta nos sorprendió realmente, teníamos la idea de que era una ciudad industrial, o simplemente un lugar X en el mapa de Estados Unidos, y pues no.. Es un lugar lleno de bosques. Verde por todos lados, entre Casa y Casa hay bosques, entre mall y mall hay bosques. Es una ciudad muy extendida así que no ves ni aglomeraciones de gente ni de edificios. La gente muy amable, la mayoría de color (oscuro por supuesto, tengo prohibido decir negro jajajaja que para mi no es ninguna ofensa al contrario, es una garantia de alegria), así que oyes gritos y carcajadas en cualquier lado.
Desde la tarde que llegamos nos dedicamos a recorrer la ciudad. Rentamos un carrito así que mi marido era el dueño de la Highway (nótese mi alto dominio del idioma)... y bueno, el tío Pancho nos había pedido comprar una computadora para el, aparte de una para mi (la que estoy estrenando en este momento) en Marietta. Y bueno, nos dispusimos a pedir direcciones para llegar a la calle de Marietta, pero no, a lo que teníamos que llegar era a la ciudad de Marietta. Nos mandaron a otro Mall precioso y enoorme pero no era lo que queríamos así que después de comer en un Panda Express y ante un momento de indecisión decidió mi marido en ir hasta allá. Bien armados de varios mapas y todas las buenas intenciones agarramos la 285 y luego la 41 y palla vamos...
Llegamos a los 15 minutos sin casi perdernos considerando que yo era la copilota, la que veía el mapa y la que tenía que decir que salida tomar, y nos fuimos directamente a la tienda de las computadoras, un par de vueltas mas y llegamos. Resumiendo, la del tío Pancho no la compramos pero la mía si, jeje, un mouse para no andar tonteando y de ahí a los malls. Ataque con singular alegría y haciendo honor a lo aprendido con mi comadre Blanca en las Vegas, me hice de ropita, la bolsa de mi compu, Gómez unos zapatos muy cómodos y agua, mucha agua.
Al día siguiente regresamos a Marietta, compramos más cosas y de ahí nos fuimos a cambiar el Citypass (ultrarecomendable!) para entrar al Acuario de Georgia, el Museo de la Coca- Cola y Cnn. Pero antes de llegar a nuestro destino, por alguna jugarreta acabamos metidos en el campus de la Universidad de Georgia! chamacos por todos lados, edificios de todas las carreras, que arquitectura, que leyes, que medicina, y los chamacos seguían saliendo de todos lados, que las casas de las fraternidades Alta Puca Mata o como se llamen. Después de dar vueltas como media hora y sin preguntar a nadie logramos salir, casualmente casi enfrente del estacionamiento de la Coca. Así que nos estacionamos y a caminar.
El Acuario es una cosa divina, toda clase de pescaditos, pescadotes, tiburones, ballenas, medusas, lo que se les ocurra que viva en el agua ahí lo tienen, que chulada de verdad! todo limpio, bonito, los pescaditos bien gordos, buenos para el sartén jajaja. Acordándonos del compadre Jorge que tanto le gusta el mar y todo lo que vive ahí, y lo mucho que lo hubiera disfrutado.
De ahí atravesamos una explanada y entramos al Museo de la Coca, muy divertido y lleno de recuerdos, todos los comerciales que veíamos en nuestra infancia, las cancioncitas que nos sabíamos, los refrigeradores viejos, y mil cosas más. Probamos como 160 diferentes productos que hace la Coca por todo el mundo, algunos muy bueno, algunos espantosos! Querías poder comprar todo lo que te vendían en la tienda pero pues no, empezábamos el viaje y no se podía.
Después nos fuimos al edificio del CNN, pero para llegar había que atravesar el parque Centenario conmemorativo de las olimpiadas, enoooorme, bien bonito. Cuando llegamos del otro lado pues ya hacia hambritita y nos metimos a comer a un restoran chino, que no nos gusto nadita y nos cayo pesado pero bueno, el hambre nos la calmo jajaja y nos dirigimos al CNN, pero oh, el último tour terminaba a las 5 y pues no nos toco. Nomas nos tomamos un cafecito en loby y tomamos algunas fotos.
De ahí al hotel, para entonces mis pies eran una pena.
Al día siguiente nos fuimos al Zoo, por supuesto los animalejos estaban en la hueva total, o de plano no querrían que yo y las 800 gentes más que estaban parada frente a su jaula los fotografiáramos, así que no tome mucho. El Sr. gorila que tomaba el sol y los pandas fueron los mas accesibles.
Acabando nos fuimos al Stone Mountain, un parque precioso donde hay una piedrota tamaño mundo, donde grabaron a unos héroes que realmente no supe quienes fueron. El lugar bien bello, con un club de golf muy cuqui, lugar para acampar, lago, bosques y mas bosques.
En algún momento nos metimos a comer al Red Lobster.. bueno! esos camarones, la langosta, la mantequilla!!! buenisimo!
Los pies... bueno como te digo que me moría!
Al día siguiente nos fuimos al Centro queríamos ir al Centro Histórico de Atlanta y después de perdernos por mi necedad jejeje nos paramos a preguntar, una señora súper amable no nos dio las señas, nos llevo!! no andábamos tan lejos pero nos dejo con la boca abierta la amabilidad y buena disposición.
Y bueno, llegamos y precioso (again!!) tienen un museo enorme de la guerra civil de USA, y afuera, entre riyitos y bosques han reconstruido una casa de los primeros pobladores del lugar, de madera toda, con un cuarto para ahumar los jamones, la cocina que estaba separada de la casa principal, la herrería etc.
También hay una casa enorme de un hacendado del azúcar, que se la construyo a su esposa con todos los lujos, con toda la influencia de Francia e Inglaterra que tanto les gustaba en esa época. Desgraciadamente dentro de la casa no permitían tomar fotos, pero creanme que esta igual que hace 100 años o más. Los descendientes vivos de esta pareja le vendieron el lugar al Ayuntamiento para que lo hicieran museo, como último deseo de esta Señora.
Acabando ahí nos fuimos a un restorant que le habíamos echado el ojo desde antes, pero estuvo cerrado cuando quisimos ir. Longhorn se llamaba y obvio eran carnes y mas carnes! buenisimo!!
Después al hotel a empacar y dormirnos temprano, pues salíamos a las 6 de la mañana a Nueva York y había que estar con anticipación en el aeropuerto, aparte de entregar el carro.
Nos levantamos pues a las 3 de la mañana (uta) y nos fuimos a dejar el carro, rapidito lo recogieron y ya estaba el camioncito para llevarnos al aeropuerto.
Checamos maletas y ahora trasládate a la sala E, que por supuesto es la ultima de la lista..... Es tan grande el aeropuerto que tienen un trenecito que te lleva de una sala a la otra, peeero empieza a funcionar a las 6:30 de la mañana!!!! o sea, a caminar!!!
y bueno, como teníamos buen tiempo pues ahí vamos, nosotros y todos los demás pasajeros orates que viajan a esa hora pues....
Finalmente y con la lengua de fuera llegamos a la sala y al ratito nos subieron al avión con destino a NY.
Y hasta ahí queda mi historia de hoy, continuo después con lo que sigue.
pd, te preguntaras que pasa con mis pies no? pues entre la reuma y la gordura me mataron durante todo el viaje... mi marido estaba medio molesto conmigo porque no le aguantaba más de 10 horas caminando peroo de plano cuando ya no aguantaba más me echaba al suelo jajaja.
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