lunes, mayo 29, 2006

HISTORIA DE CANGREJOS



Había una vez dos cangrejitos, jóvenes, bellos, de grandes y saltones ojos negros, con unas tenazas que daba miedo solo de contemplarlas, un caparazon duro y hermoso y cuatro pares de patas que corrían como el viento.

Eran grandes amigos, a uno le encantaba construir largos túneles y viviendas, cada vez mas grandes y complicados, al otro, le preocupaba mas que esos largos y enormes túneles acabaran algún día con las otras especies que convivían con el grupo de cangrejos.

Si no estaban trabajando, cada quien en lo suyo, siempre los podías ver juntos, platicando (como sea que los cangrejos platiquen) o jugando, o simplemente tumbados al sol, filosofando acerca de la vida, del futuro y por supuesto de las cangrejitas que habitaban en la comunidad.

Había una en especial que cuando pasaba caminando, de ladito por supuesto, coquetamente frente a ellos, los hacia suspirar disimuladamente.

Ella era la cangreja más inteligente, más dulce, más graciosa, más buena, decían los dos muy de acuerdo.

¡ Mira esos ojos! ¡Mira esas tenazas! ¡Mira como mueve su masa corporal al caminar!

Cada uno la veía y adjudicaba un calificativo diferente y más glorioso que el anterior.

Todo hubiera quedado así, en piropos y adjetivos calificativos, por que la susodicha cangreja ya tenia entregado su corazón a un Sr. Cangrejo de la comunidad vecina.

Se decía que se amaban con locura y que sus ojitos bailadores no volteaban a ver a nadie mas.

Pero eso no evitaba que cada vez que caminaba alegremente acompañada de sus amigas cangrejas frente a nuestro dos galanes, levantara un poquito mas las tenazas, moviera su caparazón un centímetro mas de lo normal pero sin llegar al descaro y que su risa (si se rien los cangreso no?) subiera unos cuantos decibeles mas de lo corriente, para llamar la atención de los galanes.

Nuestros buenos muchachos se levantaban sobre sus patitas traseras, ampliaban su pecho, cargaban sobre de ellos rocas de peso impensable y todas esas locuras que por siempre han hecho los jóvenes (cangrejos) para atraer al sexo opuesto.

Decía yo que esto no hubiera pasado a mas si no hubiera ocurrido un día, que estando en una demostración de fuerza sobre-cangrejil, que accidentalmente uno de ellos (realmente no se cual) dejó caer un gran pedrusco sobre la pata trasera del otro, causándole por supuesto un increíble dolor, por lo que soltando su propia carga, que fue a caer sobre la cabeza del compañero, se abalanzaron uno contra el otro, dispuestos darse unos buenos pellizcos con esas enormes pinzas.

En esto estaban, dándose arriba, abajo, en medio, rodando por los montículos de arena que al rozar con sus caparazones soltaba chispas, sonando las pinzas, echando espuma por la boca, tratando de amedrentar al que consideraban en ese momento su enemigo.

De repente oyeron la risa coqueta tan conocida y amada, el lechuguino caminar y se quedaron quietos, estáticos, solo para observar como el objeto de sus más oscuros deseos se fundía en un gran abrazo de amor con el dueño de su corazón, aquel que venia de la comunidad vecina.

Los miraron hasta que desaparecieron en uno de esos magníficos túneles que construía nuestro amigo y siguieron mirando un rato más.

Por fin lentamente voltearon a verse uno al otro, cabe decir que todo este tiempo seguían en un abrazo forzado, que recordaba claramente a los atletas griegos del pasado, con las pinzas bien agarradas al caparazón contrario.

Uno de ellos, el que se preocupaba por la biodiversidad y las especies sonrió con disimulo, para no ofender al contrario, tratando de contener la carcajada que subía como agua gaseosa por su garganta, en alguno momento el otro cangrejo también experimentaba lo mismo, hasta que sin poder contenerlo mas, soltaron la mas jubilosa carcajada y rodando por la arena, los amigos-rivales no podían controlar lo que los sacudía por dentro.

Por fin, exhaustos y con los ojos llorosos de tanto desternillarse, se quedaron mirando, unieron sus pinzas en un hermoso saludo y con eso sellaron la gran amistad que los unía, jurando en silencio que ninguna coqueta cangreja volvería a ponerlos en esta situación.

Sacudiendo sus hermosos caparazones, subieron la cuesta platicando de la nueva chica que había llegado, decían que venia de playas lejanas, que había viajado mucho……

sábado, mayo 27, 2006

Había una vez….



Había una vez una mujer extraña, en un país extraño, ajeno y misterioso.

Y ella vivía y permanecía ahí, en ese país extraño, día a día, sin esperar nada más que un nuevo amanecer, para seguir viviendo y sobreviviendo hasta que llegara el atardecer.

Y ella veía el mar y soñaba con el vaivén de las olas, con lo que llegaría un día a la orilla de la playa de arena blanca, como una ofrenda; después de una noche de tormenta,.

Y ella caminaba junto al mar, buscando, esperando, anhelando.

Y un día, arribo un hombre extraño, de un país extraño, ajeno y misterioso.
El era un hombre raro con sabor a sal, venido de lejos, traído por el mar.

Y sus diferencias eran tan grandes como desiguales eran sus mundos, pero al encontrarse sus ojos, al mirar en sus pupilas, se descubrieron con los mismos sueños, con los mismos deseos, con los mismos temores.

Y se amaron… y se unieron….
Y ya no serán unos extraños nunca más.
Ahora son uno solo con el cielo y el mar.

Ella duerme en sus brazos, el besa su regazo. Después del amor, antes de soñar…
El la mira arrobado, imaginando los mares que habrán de surcar, los anhelos por realizar.

Ella escucha, entre sueños, al hombre, a la luna, a la vida que le dicen:
Duerme ahora mi niña, descansa ahora mi amor, ya estas en casa.



Propiedad de S.L.Villerias

jueves, mayo 25, 2006

Hoy, me duele la tripa

Hoy, la Colitis me esta matando.
Mi pobre panza se infla, recordandome a esos globos de alegres colores que flotaban sobre la cabezas del sr que los vendia, fuera del circo, o en la entrada del parque.
Imagino a mi panza como un globo rojo, grande y cacheton, tan inflado que cualquier pinchito, una ramita, el pico de un pajaro, los olanes del globo vecino, podrian reventarlo y lanzar al aire miles de pedacitos de globo-panza..
Mi panza sufre, y yo tambien.
Una fuerte rafaga de stress es la culpable.
Ni modo, a tomar las medicinas que mi sonriente doctor-compadre-bestfriend me mando.
A no tomar cafe, no tomar leche y sus derivados (queso!!! auch), no comer aguacate, pocos cereales, mayonesa, carnes y nada de irritantes...
Tecito muy recomendado, y mucha aguita comadre.. me decia sonriente mi doctor-compadre-bestfriend y relajate comadre, relajate...
Pero si yo me relajo mas me muero!!
En fin, hoy, me duele mi tripa; espero que mañana ya no.

miércoles, mayo 24, 2006

Mi superhéroe favorito

(Hoy y siempre, mi hijo..)

Desde siempre, los héroes han sido muy importantes para ti.

En los cuentos nocturnos, siempre debía de existir un héroe, que arriesgara su vida por su pueblo, por su amada, por su caballo.

En la vida real, también había héroes para ti.

Aquel impresionante hombre moreno que podía con una mano, maniobrar ese camión de carga, que te despertaba por las mañanas con su potente rugido y te hacia correr hacia la ventana, donde te quedabas quietecito, susurrando, runnn runnnn, hasta verlo desaparecer en la esquina siguiente.

Tu padre era un buen héroe también, que con sus enormes y fuertes manos podía hacer de cualquier cosa una buena casa de campaña, podía componer cualquier artefacto por mas raro que se viera, podía enderezar una buena espada con tan solo tocarla.

Tu abuelo fue el héroe sabio, al que acudías cuando necesitabas saber algo, el que sabia hacer castillos de arena, el que te enseño el momento exacto de acercase a la ola y recoger agua en tu cubeta, el que te enseño el amor a los libros y a una buena alegata.

Tú fuiste un héroe también, encarnado por los grandes de antaño.

Lograr el peinado correcto de un héroe representaba miles de peligros, conseguir que tu hermana se convirtiera de tu caballerango en una doncella en peligro, requería de toda clase de trucos y chantajes.
Que el perro se quedara quieto para que tú pudieras montarlo como el corcel negro de tus sueños, era una muestra mas de la paciencia de un hidalgo y convencer a mama que tenias que dormir con la capa puesta y la espada en vilo por si se presentaba un ataque repentino, era una gran hazaña en si.

Probaste diferentes vestimentas, diferentes peinados, diferentes accesorios, que crecían y cambiaban conforme lo hacías tú.

Pero llego el momento en el que el volar ya no era tan importante, en el que matar dragones era una chiquillada, en el que las doncellas no se dejaban salvar mas.

En el que las capas ya no llegaban al suelo y los pantalones de superhéroe ya quedaban muy cortos.

Y te quitaste el traje y lo guardaste en algún rincón de tu alma, a donde acudes tu solo de cuando en cuando, para disfrazarte una vez mas. Cuando tu damisela esta en peligro, cuando el indefenso grita por ti, cuando el mundo necesita una vez mas, un superhéroe como tu.


Propiedad de S.L.Villerias

martes, mayo 23, 2006

Hoy, me siento bien..

Hoy tuve mi primer experiencia como conductora de un panel frente a publico de "verdad"...
Habia tenido contacto con pequeñas multitudes cuando fui maestra y daba las platicas a principio de año, pero era algo estudiado y preparado con antelacion..
He juntado un poquito de experiencia con mi programa en internet, pero no tengo publico directo, solo mi invitado, la camara, mi camarografo y yo...
Esto fue diferente y me gusto, lo hice bien y me encanto, mi ego, feliz y gordo como le gusta estar..
Hoy, me siento bien.

ZAPATOS DE CHAROL ROJO


Eras muy pequeña cuando te los regalaron, pero desde siempre habías soñado con ellos, era como la antelación de los bailes y las fiestas a las que podrías atender si fueras lo bastante grande como para tener unos zapatos de charol rojo.

Eras muy pequeña, por lo tanto, los zapatos eran muy grandes. Pero eso no impidió que día con día, antes de ir a la escuela de la mano de mama o regresando sudada y cansada después de una mañana de trabajo, subieras al banquito que estaba junto al ropero y sacaras con mucho cuidado, como si de cristal se tratara, la caja de tus zapatos.

Quitabas con delicadeza el papel de china que los envolvía y los mirabas, quietecita, sin pestañear. Después de un rato te decidías a probarlos, a ver si ahora si te quedaban bien y día con día, los regresabas a la caja, con un suspiro y la esperanza pintada en tus ojitos de que mañana si te iban a quedar.

Y pasaron las semanas, los meses y por fin un día, cuando ya la costumbre de subirse al banquito era parte de la rutina diaria, retiraste el papel que los protegía, que a fuerza de tanto uso, ya se desgarraba. Y los miraste una vez más y miraste tus piecitos que se asomaban debajo del largo vestido y tomaste los zapatos y te los calzaste…

¡Oh sorpresa enorme cuando tus deditos ya no tenían espacio para bailar solos! ¡Que felicidad cuando al abrocharlos, no se quedaban detrás de tus pasos!

La alegría de la meta lograda, de la victoria anhelada, del sueño cumplido se veía en tu carita, te pusiste de pie en un brinco y corriste gritando, loca de contenta, ¡Me quedan! ¡Me quedan ya mis zapatos de princesa!

Los estrenaste en tu cumpleaños, con un hermoso vestido de olanes blanco y rojo, moños en la cabeza, pulseras en el brazo, todo escogido especialmente por el color de los zapatos

Desde ese día no conocieron reposo. Los zapatos de charol rojo aprendieron a correr, a bailar, a brincar; soportaron polvo, lluvia, berrinches, vacaciones, fiestas infantiles, hasta que un día no pudieron más.

Su protesta si hizo patente al empezar a apretar tus deditos, al ya no ser tan cómodos ni tan bonitos, al haber perdido un moño y un poco de brillo.

Era hora de dejarlos descansar, era hora de cambiar y los fuiste dejando ahí, en el ropero, cada vez menos solicitados, hasta que un día desaparecieron.

Tú estabas convencida de que el ratón había venido por ellos, para llevárselos a otra niña que soñaba también, con unos zapatos de charol rojo.

Con todo mi amor para mi nena...

Propiedad de S.L.Villerias

domingo, mayo 21, 2006

Escribir en un blog...

Decidirme a escribir en un blog es algo que me ha dado vueltas en la cabeza por mucho tiempo, es como mostrar al mundo mi diario de quinceañera, o como platicar en un programa televisivo mis cuitas, es una dura prueba a mi ego.

Pero por otro lado es una necesidad, es un gusanito que anda dentro de mí queriendo decir mis cosas, es como tener hambre después de haber comido y no, no es gastritis.

Que alguien opine libremente acerca de mis mas hondos sentires requiere de una madurez y aceptación a la critica que espero encontrarla por ahí, en algún lugarcillo de mi cabeza, para no caer en la fuerte tentación de “borrar” todo lo que no me guste, me deleito con el aplauso y la felicitación, ahora me tiene que gustar (o de perdida debo consentir) la critica y la oposición a mi pensar.

La palabra escrita es una de las maravillas del humano y poder expresarlo libremente es uno de los mayores logros y responsabilidades que existen, y como mujer libre y responsable, me aviento a hacerlo.. y a ver que pasa…

viernes, mayo 19, 2006

LOS ANGELES



Un día me preguntaste si existían los ángeles, y al sentir que yo dudaba, remataste diciendo, ¿acaso nunca has visto uno?

Ahora te contesto, criatura, que existen muchos tipos de ángeles, los hay de todos tamaños, colores y sabores, los hay buenos, dulces y generosos, los hay traviesos, chistosos, picositos y ocurrentes, aunque también los hay enojones y regañones y amargos.

Muchas veces en nuestras vidas, estos ángeles nos tocan con sus alas, algunos nos rozan solamente una mejilla al pasar, y dejan tras de si un dulce sabor de boca.

Otros mas nos toman de la mano, bien fuerte para podernos apoyar en ellos, y caminan con nosotros, enseñándonos, guiándonos y al terminar su tiempo en nuestra vida desaparecen dejando tras si un poco de dolor, un mucho de alegría.

Y otros mas se quedan a vivir en nuestro corazón, nos pertenecen y nosotros les pertenecemos, podemos montarnos en sus alas y volar con ellos, llegar a lugares maravillosos, a sentimientos desconocidos, a palabras nunca oídas, seguros de que nos regresaran a casa a salvo.

Con ellos podemos reír, llorar, cantar y bailar, podemos ser como nos gusta ser, son la magia que nos faltaba para convertirnos nosotros también en ángeles, para aprender a volar como ellos, para tener nuestras propias alas.

Así que, la próxima vez que quieras ver un ángel, colócate frente al espejo, por que, ¿sabes? Los ángeles también tienen reflejo.


Propiedad de S.L.Villerias

miércoles, mayo 17, 2006

¿Será por que te amo?


¿Será por que te amo que te odio tanto?

¿Será por que te amo que puedes despertar en mi tanto rencor?

¿Será por que te amo que en un segundo quisiera destriparte con mis manos, convertirte en picadillo y tirarte a los leones?

¿Será por que te amo que quisiera clavarte mil alfileres en esos ojos negros que me miran parpadeando, como no entendiendo por que te odio tanto?

¿Será por que te amo que puedo brincar de la risa al llanto por un mordaz comentario tuyo, al tiempo que agradezco que mis miradas no son puñales pues estarías ya como mariposa de muestrario?

¿Será cierto en mi caso que del amor al odio hay solo un paso?

¿Será el regreso tan vertiginoso? ¿ O habrá que desandar mucho camino?
Dios! ¡Cuanto te amo y cuanto te odio!!

Propiedad de S.L.Villerias

POBRE NIÑA


Ella es joven, ella es bella, su cuerpo es firme, erguido y ondulante y al caminar, provoca miradas encontradas.

Ella ríe fuerte, canta, baila, creyendo de verdad que el sexo de una noche tiene algo de felicidad dentro.

Ella llora, grita, maldice, recoge los pedazos de alma, mientras su dura vida pasa chorreando entre sus dedos.

Su mundo gira en la locura de la alegría artificial, que termina mucho mas allá de la noche, en la que se mezclan el sudor y el vomito, la realidad y la inconciencia, el pudor y la indecencia dejando atrás, cada vez mas, a la inocencia.

Ella esta perdida, rompió la brújula que la guiaba, ahora busca la luz que la lleve a lo menos, a la mañana siguiente.

No recuerda ya cuando fue, no sabe ya que paso, no entiende por que esta en ese lugar oscuro y húmedo, mas sola que nunca, por que las camas cambian de forma y las sabanas de color, pero el sentimiento es siempre el mismo.

Ella quiere terminar con el dolor de tantos años, con el abandono incesante, con el rechazo imaginado, pero erró el camino, tomo la curva equivocada y ahora regresar, corregir la dirección es tan difícil, tan doloroso y ella esta tan débil, tan cansada.

Quiere gritar y su voz no se escucha,
Quiere correr y sus pies se transforman en plomo,
Quiere respirar, y lo que inhala difícilmente se puede llamar oxigeno,
Quiere pensar, pero su cabeza se llena de humo negro y pegajoso.

Busca la salida y lo único que ve es su vida pasar, lentamente, dolorosamente, inevitablemente, irremediablemente.

Propiedad de S.L.Villerias

EL RUBIO Y EL MIEDO.

La oscuridad era total en la oficina, ni siquiera por la ventana entraba el mínimo rayo de luz. El apagón era total. Solo los sonidos de la noche se lograban colar, las sirenas de las patrullas aullando, los lejanos gritos de terror, de dolor.

La noche era lúgubre y aterradora, perfecta para un espectáculo de dolor.

Solo la figura invisible se movía en las alturas libremente, pero mucho mas abajo, la vida se detenía.

El rubio se encontraba sentado ante su escritorio, mirando fijamente su teclado, como si con esto pudiera hacerlo funcionar. Tenia que escribir de alguna manera lo que acababa de observar por la ventana, para no salir gritando como un demente.

La ametralladora había disparado a ciegas desde la azotea de enfrente, soltando una estela de humo detrás de cada detonación. Sin una razón aparente, sin una advertencia, sin nadie que se lo adjudicara.

Las infelices víctimas yacían en el suelo, 5 pisos más abajo, tirados en la calle como muñecos de papel, recortados con las tijeras infantiles de un niño. No había nada que hacer, ni por los muertos ni por el asesino, que huyo saltando de azotea en azotea hasta que desapareció de su vista.

El rubio apuro su taza con el resto del café amargo y frió, se sentía como desenfocado, como si un circuito le hubiera dejado de funcionar en la cabeza.

Movió el ratón, miro la pantalla con la hoja de Word en blanco y con una lagrima resbalándole en la mejilla, comenzó a escribir.

Propiedad de S.L.Villerias

martes, mayo 16, 2006

CRECER COMO SI NO DOLIERA…..

Crecer como si no doliera,
Tocar como si se acabara,
Mirar como si desapareciera,
Reír a carcajadas, llorar, correr, gritar, como si no hubiera un día mas….

Crecer como si no doliera,
Sin pensarlo ni planearlo,
Como preparando el tiempo para salir volando…

Crecer como si no doliera,
Dejando atrás la infancia,
Los juegos, las rimas y los mimos,
Crecer por que si, tropezando, cayendo, levantando
Crecer aprendiendo, olvidando, recordando…

Crecer sin más, como la enredadera,
Sin mirar atrás, sin pensar en los demás,
Crecer por inercia, por que el cuerpo lo manda,
Sin entender siquiera que es lo que nos pasa…

Crecer a base de raspones, coleccionando cicatrices,
Como trofeos de guerra, de las que se curan con un beso,
o de las que se quedan grabadas en el alma…

Crecer para darse cuenta que papá no es un superhéroe,
Que mamá no sabe todas las respuestas,
Que un mejor amigo puede traicionar,
Y que detrás de unos frenos y unas pecas,
Se esconde una gran persona…

Crecer de la mano de los que te quieren, de los que te cuidan,
Para luego cambiarla por la que te hará feliz,
Por la que te hará llorar,
Por la mano amiga, por la mano amada.

Crecer como si no doliera, como si no angustiara la futura soledad,
Las noches sin sueño, los días sin pan.

Crecer, sin imaginar la vida que espera tras ese porta
l.
Propiedad de S.L.Villerias

Las sonrisas

Las sonrisas son de sabores. Una sonrisa dulce es la llave para abrir fortalezas, para derrumbar murallas, para traspasar armaduras, una sonrisa dulce ilumina la carita de un bebe ante la imagen de su madre, o la de la novia que mira hacia su futuro frente a un altar, o la tranquila sonrisa de la persona amada que nos da su ultimo adiós en paz.

Las hay también saladas como el mar, la que nos regalan nuestros hombres que al trabajar, la mezclan con sudor y prisa. La del niño que al juntarla con barro, caramelo y alegría, nos la embarra con descuido al pasar.

Las ácidas ante la impotencia, la vergüenza, la ignorancia, la burla y la critica. Cuando nos reconocemos culpables, cuando nos reconocemos caídos.

Y las hay también amargas, para el desamor, la desdicha, la despedida a destiempo, una sonrisa amarga es capaz de dejarte sin palabras, de hacerte sentir el dolor mas fuerte sin haberte tocado siquiera, de querer morir, de querer matar.


Tomos hemos saboreado una sonrisa, hemos sentido la magia que brota de ellas, las palabras no dichas que se pueden escuchar, los muchos te quieros que pueden llegar; al sonreír se abre tu alma y se cierran tus ojos, para que así no les veas diferencias a los que les sonríes.


Propiedad de S.L.Villerias